
Como todos ustedes saben nuestro país sufrió una ola de privatizaciones de empresas e industrias del Estado en conjunto con una apertura de mercado que destruyo a las empresas de capital nacional, generando una elevada tasa de desempleo.
Desde la primera década del 2000 en el país se modifica la política económica adoptándose lo que se conoce como sistema Keynesiano (DG=C+I+G+EX) que permitía combatir el desempleo a partir del incremento de la demanda global. De tal forma, uno de los medios de fomento del consumo de las familias es mediante el Gasto Público que realiza el Estado en los planes sociales (algunos devenidos en Derechos) que distinto nombre tuvieron y entre los cuales hoy está la Asignación Universal por Hijo, como tales, consisten en una ayuda económica sin contraprestación a cambio que el Estado realiza a los individuos que presenten una determinada condición o problemática a atender. Dichos montos no representan cantidades significativas de dinero, esto quiere decir que los sujetos beneficiados no pueden atender la totalidad de sus necesidades humanas pero si cubrir algunas de ellas. Además, reiterando la idea, este escaso monto no sirve para el ahorro, sino que debe indefectiblemente gastarse de inmediato, por ende colabora a estimular el consumo y circulación monetaria como la formula Keynesiana indica. Por otro lado, permite que el Estado direccione los rubros donde mayor flujo monetario ingrese y a que tipo de capital, a modo de ejemplo, si revisan el listado de precios cuidados encontraran que los alimentos de industria nacional son más económicos que los importados, además que determinados productos de necesidad o consumo familiar son cubiertos por este tipo de políticas.
Analicemos ahora el fenómeno de la cuestión laboral, se define al trabajo como toda actividad licita que desarrollan los humanos a cambio de una contraprestación monetaria, pero no se detiene allí, ya que nuestra legislación, en sus variadas modalidades de contratación de trabajo, otorga una gama de "Derechos" con los que goza el trabajador, a saber: obra social, aporte jubilatorio, cobertura por accidentes de trabajo, retribución justa, etc.
Esta es la estructura básica o las cuestiones mínimas que debe contemplar todo contrato de trabajo para evitar su precarización como lo es el trabajo "en negro".
Imaginen ahora que el Estado en lugar de prestar planes sociales presta puestos de trabajo, primero necesitaría crearlos, osea montar industrias o empresas par
a hacerlo, luego en una segunda etapa contratarlos, pero además debería retribuirlos como la ley en materia laboral indica, por eso el coste total de esta propuesta es mucho mayor. ¿Pero es viable esta última propuesta? Por su puesto que si, pero para eso en primer lugar deberás dejar de quejarte cuando el Estado cobre más tributos, dejar de evadir impuestos y acceder a un mayor control de los organismos fiscales como la AFIP, entre otras medidas...
Yo como tantos otros prefiero la creación de puestos de trabajo antes que otorgar planes sociales, pero también entiendo que volver a montar un aparato productivo lleva mucho tiempo, y mientras tanto algo hay que hacer con aquellas familias que menos posibilidades de ingresar al sistema tienen, por ello es que creo que como medida temporal sirve hasta que logremos un mayor proceso industrial (que reitero, necesita varios años para concretarse).
Las políticas no son caprichosas, no todo se debe resumir a una queja, cuando se ataca una idea debe ser con fundamentos. Dirigir un país no es una tarea sencilla y tomar una decisión en materia de política económica y social tampoco, por ello es importante conocerlos a fondo para tomar postura y proponer una alternativa viable distinta.
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