
Debemos tener en consideración primero cual es el objetivo de la nota, pues ninguna producción periodística es neutra. Plantear que es solo una muestra de la realidad sin dimensionar las implicancias que ello tiene es falso, porque toda muestra de la realidad social tiene una intencionalidad política.
En el presente caso, el señor Jorge Lanata podría intentar resguardarse bajo el fundamento de intentar "desvelar" la situación de desamparo de algunos jóvenes, o la tan clásica "falta de presencia estatal". Pero lo cierto es que con esto no solo que no esta colaborando con la situación de "Polaquito", sino que hecha más leña al fuego a la polémica cuestión de la baja de la edad de imputabilidad y estigmatiza aun más a los jóvenes en situación de pobreza. Más aun porque lo revelado en una entrevista puede no condecirse con la realidad, ¿por qué tenemos que creer que todo lo que allí se dice es verdadero? ¿Quién puede dar fe de la veracidad de ello? Pero a los responsables de la nota no les importó, ellos querían exponer a alguien como prototipo de la delincuencia, e hicieron lo más bajo que alguien puede hacer: exponer a un niño a su siniestro plan.
La ecuación es simple, si falta acción estatal debe producirse una respuesta del Estado frente al fenómeno, pero el problema es cuando esa decisión se inclina por la respuesta penal.
Este tipo de producciones lejos de colaborar con la causa son funcionales a un discurso de legitimación del aparato punitivo del Estado. Esto deja al desnudo el escaso respeto por los Derechos del niño. "Polaquito" es el objeto de un vergonzoso show mediático de legitimación discursiva en la esfera política.
La demagogia no sede terreno, más recortes en materia social para ampliar la respuesta del aparato penal...
¿Usted qué piensa?
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